Por 4to año consecutivo, Pa’l Norte demostró porque es el festival más poderoso del Norte.
Si bien nunca ha contado con un lineup tan internacionalmente diverso como otros competidores, siempre se las arregla para dejar un excelente sabor de boca, con una organización superior a cualquier otro festival en el área.
La experiencia que Pa’l Norte ofrece va mucho más allá de la música, ofreciendo desde juegos de kermesse, verdaderas activaciones de patrocinadores, una gran variedad de comida, y hasta una zona comercial con distintas tiendas locales.
Esto, se suma al increíble poder que la alineación de los shows completamente variados en género ofrecieron.
Probablemente lo mejor del viernes fue el set de The Kooks en el que tanto los fans como los no tan fans disfrutaron de increíbles canciones y una tremenda energía positiva por parte de la banda.
En la opinión de la mayoría en redes sociales (incluyendo la mía) lo peor del festival fue Flo Rida, de quien claramente se esperaba mucho más. Casi al finalizar su set el público se hallaba harto, esperando con ansías que terminara para que Calle 13 se apoderara del escenario Tecate.
La situación fue muy distinta el sábado, en el cuál al terminar Café Tacvba, gran parte del público estaba impaciente por que saliera Imagine Dragons, quienes no decepcionaron en lo más mínimo, mostrando un set que validó su posición en el póster, siendo estos probablemente, lo mejor del festival. Para después terminar con los ya tradicionales fuegos artificiales. (¿Alguien se quedó a ver Intocable? No lo creo).
El gran león del norte deja este año un nivel muy difícil de superar para la competencia, y aunque un buen lineup internacional puede ayudar, después de este fin de semana queda demostrado que eso no es suficiente, hay que mejorar la experiencia completa.
#VamosPalNorte
